The Diary of Anne Frank 1959 "EL DIARIO DE ANA FRANK"
LA VANGUARDIA (14-11-1959)
He aquí una historia que ha pasado sucesivamente por todos los medios de expresión —el escrito, el representado, el filmado— saliendo victoriosa dé todas las pruebas. Esta unanimidad con que ha alcanzado el éxito en todos los campos artísticos. se explica por lo que hay en ella de sinceridad humana, de autenticidad. de ternura sencilla y patética. de emoción convincente. En todas las latitudes la conmovedora historia de este grupo de judíos confinado durante años en un miserable desván de Amsterdam y destinado finalmente a sucumbid, ha hecho derramar lágrimas a las multitudes. El drama es en sí desgarrador, pero relatado por Ana Frank, su más tierna protagonista. conmueve infinitamente más. La vivaz y simpática adolescente consiguió, sin proponérselo, dar a este relato que no estaba destinado a ser hecho público una emoción que no superarán nunca los profesionales. Sólo la idea de que esta muchachita estaba describiendo día a dia su martirio sin calcular su magnitud, hasta a dar al «Diario de Ana Frank», sea cual sea la versión en que se ha leido o visto, una fuerza de captación inigualable. La Oficina Católica Internacional ha dado a esta pelicula el gran premio de 1959. Este galardón otorgado a una historia de judíos por una alta institución católica prueba lo que hay en ella de humano y de universal. Ningún corazón generoso puede permanecer, indiferente a esta tragedia vivida y real de nuestro tiempo. La adaptación cinematográfica de «El diario de Ana Frank» ha sido realizada por los mismos escritores a los que se debe la versión escénica, y poseo idénticas virtudes. El realizador de la película, George Stevens. ha recogido la historia con todo su desnudo y desganado patetismo, sin sofisticarlo ni pretender hacerle cortes ni añadidos. Lo que escribió la niña torturada de Amsterdam paso por la pantalla con una claridad sencilla, ingenua, pero al propio tiempo lacerante y angustiosa. En muchos aspectos la cinta podría pasar por una película de «suspense», tal es la anhelante atención que despierta en la sala. «El diario de Ana Frank» ha alcanzado en la pantalla la interpretación que memela. Tras una afanosa búsqueda. George Stevens consiguió encontrar a una joven estudiante de Nueva York, Millie Perkins, para que encarnase el personaje de la niña mártir de Amsterdam. No puede decirse que sea una artista excepcional, pero se produce con una ingenuidad, una gracia timida y un encanto casi infantil que cautivan. Los restantes intérpretes realizan una creación que desborda probidad, imeligencia y largueza de medios expresivos. Todo ha sido medido equilibrado y dispuesto con exquisito tacto. Sólo asi se comprende que uno pueda seguir con tan desvelado interés una película que dura más de dos horas y media y que se desenvuelve constantemente en el estrecho espacio de un sombrio desván. A. M. T.

.jpg)

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Que te parece el blog.